El Gobierno de Estados Unidos ha comenzado a reducir sus medidas con respecto a empresas estadounidenses que hacen negocios con Huawei, comenzado con el hecho a que algunas compañías contarán con licencias para poder proveer a Huawei.

El problema legal entre Huawei y el gobierno de norteamericano lleva años y a principio de este año la compañía fue puesta en la lista negra comercial por Washington argumentando amenazas a la seguridad nacional. La orden ejecutiva limitada la llegada de componentes estadounidenses a productos de Huawei, así como también que los dispositivos de la compañías china no recibirían actualizaciones del sistema operativo Android de Google, ni acceso a algunas aplicaciones. 

A pesar de que Huawei se encuentra desarrollando su propio sistema operativo y que produce sus propios componentes, la ausencia de servicios clave como Google Maps y Google Play Store significaría un golpe fuerte a la demanda de estos modelos, sin mencionar que la producción de componentes como módems resulta laboriosa y costosa.

Empresas estadounidenses como Qualcomm, Intel y Broadcom han estado presionando para que se reconsidere la manera en que se aplican estas prohibiciones. Anteriormente el Gobierno de Estados Unidos ha comentado al posibilidad de reducir las medidas de prohibición para ayudar a empresas norteamericanas y promover las negociaciones comerciales con China, pero no se habían dado más detalles sobre estas medidas.

Ahora se ha confirmado que algunos proveedores podrán hacer negocios con Huawei mientras que la seguridad nacional no se vea en riesgo. Aún no queda claro que productos se les puede considerar seguros y cabe mencionar que esta orden aún no se ha hecho efectiva.

En repetidas ocasiones Huawei ha negado las acusaciones en su contra, mientras que Estados Unidos nunca ha presentado evidencia alguna que compruebe sus acusaciones.